En la vereda La Majo del municipio de Garzón, según las primeras versiones una niña de 13 años que estaba en estado de embarazo fue atendida por su madre al momento de dar a luz.
Según lo indicado por la madre de la menor, el bebé nació vivo y ella le amarró el cordón umbilical con una cabuya para poder desprenderlo de la placenta, la cual enterró, pero minutos más tarde la salud de ambos se complicó por lo que pidió ayuda.
La policía de infancia y a adolescencia de Garzón atendió el caso, encontrando al bebé sin vida y la menor en condiciones muy delicadas de salud por lo que fue remitida a un centro hospitalario.
Sin embargo luego de los análisis médicos y de investigaciones que se adelantan al parecer la menor era abusada por su padrastro razón por la que había concedido a tan temprana edad, y por las condiciones de salud que presentaba al parecer podría tratarse de un parto inducido si estar el bebé a término.
Autoridades investigan para comprobar la paternidad del bebé con pruebas de ADN, e indagan a los vecinos sobre el comportamiento de la familia de la menor, procedentes del departamento del Caquetá desde hace pocos meses.
La preocupación de la policía de infancia y adolescencia y el ICBF, radica en que en la vivienda hay más niñas que también podían resultar víctimas bajo la misma situación.
Tomado de Aldeasur
