Tras evaluar la imposibilidad jurídica y física de ejecutar la obra, la Secretaría de Vías del Huila decidió hace dos semanas la liquidación unilateral del contrato por $489 millones que buscaba pavimentar en concreto rígido las calles de la proyectada “Ciudadela La Voz de Dios” en Pitalito, terrenos que están ahora en manos de la Fiscalía para trámite de extinción de dominio.
Según nos explicó el secretario de Vías, Henry Liscano Parra, la decisión de la Gobernación se tomó luego de que el Departamento de Prosperidad Social (DPS) - que giraba el dinero - anunciara que no contratará la interventoría del contrato considerando que el proyecto no tenía ninguna casa o apartamento construido. Según les dijo el DPS, en esos casos se verifica que haya por lo menos el 60% del proyecto construido; evidentemente en la ciudadela no había ni casas ni apartamentos ni calles.
Liscano señaló que habrá procedimiento de conciliación con el contratista ante la Procuraduría, mediante el cual se le reconocerá la utilidad dejada de percibir, como lo ordena la Ley. Según el Secretario, no se permitió en ningún momento que comenzara la obra ni se firmó ningún documento adicional con el contratista, para preservar los recursos comprometidos.
Otras fuentes oficiales nos dijeron que en algún momento la Alcaldía de Pitalito propuso que se modificara el objeto del contrato para pavimentar las vías de acceso y no las vías internas, lo cual no fue aceptado por imposibilidad jurídica.
La Fiscalía anunció ayer que estos terrenos, al igual que otras sesenta y cuatro (64) propiedades que figuraban a nombre de los familiares y más cercanos amigos de Mauricio Parra Rodríguez, conocido como el Quesero, Opita o el Gusta, fueron ocupados en una operación conjunta entre la Fiscalía General y el Ejército Nacional en Bogotá, Cali e Ibagué, y en los municipios de Garzón, Campoalegre y Pitalito; Albania, Valparaiso y Belén de los Andaquíes (Caquetá). Parra está imputado por lavado de activos, enriquecimiento y los homicidios de Alonso Orjuela, dueño de Surtifruver, y del expersonero de Pitalito, Luis Gerardo Ochoa Sánchez.
¿Falsa motivación del contrato?
Como lo denunciamos ayer, el contrato para pavimentar las calles de este proyecto se firmó el 31 de diciembre de 2015, a pocas horas de terminar el período del gobernador Carlos Mauricio Iriarte. Y según se observa en los estudios previos, con los cuales se debe justificar cualquier contrato, todo se hizo como si efectivamente ya existiera allí una urbanización o ciudadela y estuviese habitada. “La vía de la Ciudadela La Voz de Dios presenta técnicas que no permiten la movilidad o la dificultan, para los pobladores y visitantes de este sector, amenazando el goce efectivo de derechos de quienes viven en este sector, negando el desarrollo y la prosperidad de sus habitantes”, se lee en la página 4 de los estudios.
Estos fueron firmados el 20 de noviembre de 2015 por el secretario de Vías, Julio César Fierro Cediel, Herman Casagua Albarracín como responsable técnico y el abogado Nelson Francisco Rincón Moreno.
Tomado de http://chillurko.blogspot.com.co/
