Lleva un mes de abierto y parece un botadero de basuras el Mar Rosado en Colombia


Espléndido, así es el mar rosado que lleva abierto al público un mes y al cual todos quieren llegar para tomarse una foto de ensueño con esa enorme extensión de agua.

Se llama las Salinas de Galerazamba y queda en el corregimiento de Santa Catalina, en Bolívar. Hasta allí se calcula que llegan cada día, en promedio 3 mil personas de toda la costa y el interior.

Como era de esperarse, el pueblo de Santa Catalina fue el más beneficiado. Pobladores se la han ingeniado para instalar puestos de comidas y refrescos que han beneficiado la economía de más de 70 familias.

Pero este enorme flujo de personas ha traído también una consecuencia que ya está siendo denunciada en redes sociales: la contaminación no solo de las aguas, sino también del entorno.
Botellas, bolsas, empaques de frituras, envoltorios, comida, ropa vieja y hasta objetos de aseo se están encontrando, un panorama lamentable que amenaza este patrimonio. Muchos tampoco se explican cómo es que los mismos pobladores no se han encargado de hacer limpieza y de concientizar a los turistas de llevarse a la casa la basura.

Denuncias ciudadanas
En la cuenta de Instagram Aleyluiscocinan publicaron algunas fotos y un video del panorama con el siguiente mensaje:

“Ayer finalmente fuimos a las salinas de Galerazamba. Y hasta mejor que no fuimos antes en un día más calmado, porque nos permitió ver una realidad que no se puede esconder. Te pedimos que si vas a ir en Semana Santa, lo que entre contigo, salga contigo”.

Según esta cuenta la cantidad de basura que encontraron era alarmante, tanto así que decidieron comenzar a recogerla porque sentían la necesidad de hacerlo.

Un lugar tan lindo y con tanto valor, merece que lo tratemos mejor que solo como un fondo para una buena foto”, añadieron.

Por otra parte, varios usuarios se quejaron de la pésima organización para el ingreso a este sitio:

“Hoy 16 de abril tuve la oportunidad de visitar las salinas de Galerazamba y me di cuenta de que falta mucha organización. No encontré ningún miembro de la gubernamental, tampoco se notó de entrada que realmente se trataba de un proyecto de tal magnitud que le puede ofrecer a la comunidad mucho adelanto”, cuenta una visitante.

En su experiencia afirma que no vio avisos que indicaran por donde era el lugar, ni entes gubernamentales que controlaran el turismo.


Muchas personas denunciaron las malas prácticas que se están evidenciando. Las instituciones encargadas de la minerías en la zona también se pronunciaron afirmando que el turismo desmedido no puede afectar la producción de sal del territorio y por eso exigen control.

Las autoridades del departamento aseguraron que están trabajando para formar a los gestores turísticos. Estas personas serán las encargadas de cuidar el paisaje y velar por el cuidado del sitio turísticos.
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