Un aberrante caso tiene conmocionados a los habitantes de la localidad de Engativá, en el noroccidente de Bogotá, luego de que un perro a quien llamaron ‘Negro’ muriera tras ser violado y empalado.
Negro’ era un perro que recorría las calles del barrio Villa Gladys en la localidad de Engativá. El jueves pasado, en horas de la mañana, desapareció. Ya en la noche regresó sangrando y maltratado. Allí fue rescatado por una ciudadana para ser llevado a un veterinario inicialmente, donde fue atendido y posteriormente fue enviado a otra clínica.
“Fue muy mal diagnosticado. El veterinario no era una persona que haya estudiado, le cose el ano y se lo reconstruye pero está medicación casi lo mata (...) finalmente el domingo en la noche nos solicitan ayuda y es remitido a otra veterinaria (...) le hicieron los exámenes y nos dijeron que una de dos; o le dábamos eutanasia o le hacíamos una cirugía ósea para determinar el grado de afectación y hacer una limpieza”, dijo Rosa Juliana Herrera, animalista y periodista.
Sin embargo, el animal no aguantó el procedimiento y murió en las últimas horas. ‘Negro’ entró en paro y no resistió.
Aquí #Negro minutos previos a ser intervenido. Todo el amor contigo luchador! Saldrás victorioso! Y a las autoridades les pedimos #Justicia! Revisar cámaras en el Barrio Villa Gladys de Engativá! Allí lo raptaron por horas y lo dejaron libre después del hecho @PoliciaBogota pic.twitter.com/tbjIp2drTt— Rosa Juliana Herrera Pinto (@juliherrerap) May 27, 2019
“Hacemos el llamado a los ciudadanos para que por favor denuncien, que los habitantes de Villa Gladys le digan a las autorizases si tiene algún indicio o prueba; si tienen alguna prueba de quién fue el responsable de este atroz crimen. Por dictamen fue empalado y brutalmente golpeado, su cuerpo presentaba muestras de lesiones y de golpes”, relató.
El Instituto de Protección Animal se pronunció al respecto. La directora Clara Lucía Sandoval señaló a RCN Radio: “Nosotros fuimos por el animal y la señora que lo había rescatado no nos lo quiso entregar porque, según ella, ya tenía el dinero para cuidarlo; le guiamos para que en todo caso interpusiera la denuncia”.
Y agregó: “Es una lástima de verdad que además de la agresión algunos animalistas impidan la intervención del instituto, en este caso no solo para atenderlo por urgencias sino para recolectar pruebas para apoyar el proceso penal”.
