El padrastro “es consumidor de pepas y marihuana”.
Las autoridades tratan de esclarecer los hechos en los que un bebé de cinco meses de edad resultó con varias quemaduras de cigarrillo en su cuerpo, que le provocó el padrastro “porque lloraba mucho”.
El sujeto se había quedado solo con el niño porque la madre había salido a acompañar a una hermana menor a hacerse exámenes médicos en el centro de Valledupar, capital del Cesar.
“Él es consumidor de pepas y marihuana, yo le había dicho que se fuera de la casa y me dijo que sí”, relató la mamá de la víctima a El Heraldo.
Pero a pesar de los problemas “cuando lo dejé con mi niño lo quemó con el cigarrillo”.
El padrastro es un hombre de nacionalidad venezolana de 28 años de edad.
Se fueron a vivir juntos cuando ella tenía cuatro meses de embarazo y ya tenía otra hija.
Cuando estaba quemando al bebé “le decía a mi otra hija que se callara”.
Hubo amenazas: “que si no me mataba y los mataba a ellos”, le dijo a la policía.
El bebé presenta quemaduras de tercer grado en brazos, abdomen, rostro, lengua, párpado izquierdo, dedos y palma de la mano derecha, según el informe médico conseguido por El Tiempo.
“Lo que más nos preocupa es la quemadura en la lengua”, han dicho en la clínica donde permanece hospitalizado.
“ÉL ES CONSUMIDOR DE PEPAS Y MARIHUANA, YO LE HABÍA DICHO QUE SE FUERA DE LA CASA”, MAMÁ DEL BEBÉ QUEMADO.
Bienestar Familiar regional Cesar está frente a la investigación y está en curso el proceso de restitución de derechos del menor.
Mientras el padrastro está sindicado por violencia intrafamiliar, el ICBF evalúa que pasará con el niño porque debe esperar si su victimario queda libre.
Y es que al parecer, antes también habría amenazado de muerte a su pareja.
De los 9569 casos de violencia intrafamiliar donde las víctimas son niños, niñas y adolescentes atendidos este año en Colombia, 313 casos fueron en el Cesar.
