A pesar de las pruebas presentadas por la Fiscalía, los testimonios recolectados y la solicitud de medida de aseguramiento un juez de control de garantías determinó que el estadounidense Alan Ross Thif, debía quedar en libertad.
De acuerdo con juez, no existen suficientes pruebas que determinen su culpabilidad. Este hecho generó gran inconformismo entre gran parte de los barranquilleros.
«¿En qué país estamos?, es increíble que un hombre de estos que merece todo el peso de la justicia y hoy quede en libertad; definitivamente la justicia está mal», aseguró Madeleine Sánchez, quien asistió a la audiencia del estadounidense.
El hombre fue capturado el pasado fin de semana cuando según los trabajadores del hotel, estaba manoseando a una niña de tan solo ocho años.
El Instututo Colombiano de Bienestar Familiar intervino en el caso para restablecerse los derechos a la niña.
La Fiscalía General de la Nación apeló la decisión del juez y el caso deberá seguir su curso mientras que el estadounidense gozará de la libertad otorgada por el togado.
