Según el reporte entregado por la Fiscalía, el ente investigador logró demostrar que el 12 de octubre de 2018, el religioso llamó al padre de la víctima para que llevara a la menor a la casa cural para una supuesta preparación para un concurso de infancia misionera.
En ese lugar, el sacerdote llevó a la víctima al segundo piso, supuestamente para mostrarle las instalaciones, y la ingresó al dormitorio, donde abusó sexualmente de ella y le pidió, además, que hicieran lo mismo en otra ocasión y que no contara nada sobre lo sucedido.
Tiempo después del hecho, la misma madre de la niña de 12 años fue la que denunció lo que había ocurrido.
Después de recopilar el material probatorio suficiente, las autoridades capturaron al sacerdote el pasado 27 de marzo de 2019.
La Fiscalía acusó al religioso por el delito de acceso carnal abusivo con menor de 14 años agravado, cargo que le significó una condena de 16 años de prisión.
