Se considera una mujer muy dada al trabajo social. Con su liderazgo en el sector cafetero ha logrado gestionar importantes iniciativas en pro del desarrollo de la comunidad.
Nacida en el municipio de Pitalito, María Eugenia Tovar se ha caracterizado a lo largo de su vida por su trabajo social en pro de la comunidad. Tiene 45 años y desde que lo recuerda, el trabajo por las comunidades ha sido su único propósito.
Hija de padres campesinos, casada, madre de 7 hijos, entre ellos tres que tienen la bendición de ser adoptados y contar con una familia.
“Me formé con mucho esfuerzo, como auxiliar en enfermería y ejerciendo esta profesión en el centro carcelario, de Pitalito, cooperando a la resocialización de los internos e internas del penal” dice orgullosamente.
Fue en el año 2004, cuando María Eugenia regresó al campo y dejó de lado su vida citadina. Volvió a compartir del aire puro y los paisajes propios que sólo los campos colombianos pueden presentar.
En la vereda El Guamal, corregimiento de Regueros Municipio de Pitalito, fue elegida de manera unánime como presidenta de la Junta de Acción Comunal y así mismo como presidenta de la Asociación de Juntas del Corregimiento de Regueros del municipio de Pitalito conformado por 18 veredas.
Ella, recuerda que durante este periodo fueron ejecutados varios proyectos, en convenio con la alcaldía de Pedro Martin Silva; iniciativas como dotación para el restaurante de la escuela, polideportivo para la misma institución y placa en cemento con su dotación para las canchas. La comunidad le reconoce que gracias a su gestión y tocar puertas de uno y otro lado se obtuvieron otros beneficios de obras importantes para el desarrollo y mejoramiento de la calidad de vida de la comunidad.
“Lideré la lucha en las reclamaciones justas que se hicieron al Gobierno Nacional, por el abandono, en que los administraciones de turno, mantenían el sector agrario; con ello se solucionó parte de la problemática, pues se logró, el famoso PIC, que alivió, un poco las cargas al sector y los $50 mil millones que dio en su momento el Ministerio de Agricultura para fertilización en el año 2015”.
Continuando con el trabajo social
Hoy María Eugenia no deja de lado su trabajo social; este hace parte de su diario vivir y así lo reconoce la comunidad por la cual aboga ante las esferas del poder que rigen los destinos de Pitalito, Huila y Colombia.
En el sector cafetero, sí que saben de eso. Ella, hoy día hace parte del grupo asociativo Riveras del Guachico, donde con la mesa directiva logró sacar proyectos importantes como: 90 secaderos en policarbonato, en convenio con el Ministerio de Agricultura; una alianza productiva de más de $280 millones.
“En el año 2014, fui elegida por voto popular, como representante al Comité de Cafeteros del municipio de Pitalito, para el periodo 2014 - 2018, donde represento a la mujer cafetera, luchadora, emprendedora, labor que es poco valorada y a su vez desconocida, por muchos” sostiene.
Y es que si algo recalca María Eugenia, es que la mujer cafetera es el motor de la empresa en la vereda. Sostiene, que basta sólo con voltear los ojos a este gremio para saber y entender que casi el 80% del gremio son madres cabezas de hogar; algunas son viudas, otras han dejado huella, como las mujeres chapoleras que son tan importantes en el café y otras han marcado la pauta gracias a su liderazgo.
De su trabajo en el Comité de Cafeteros, resalta que se han ejecutado, proyectos muy valiosos muchos de ellos con recursos que entrega FINAGRO, dependencia estatal que tiene como presidente a un huilense y que ha sido vital en la solución de problemáticas que aquejaban nuestros campos, como por ejemplo proyecto de placa huella, que ha mejorado la calidad de vida en sectores críticos donde era casi imposible el tránsito.
Otra iniciativa importante y que aporta a la conciencia ambiental es haber adoptado los sistemas modulares de tratamiento de aguas, contaminadas con baba de café, SMTA, donde el campesino ya no contamina el medio ambiente, ni las cuencas hidrográficas, además de gestionar mejoramiento de acueductos rurales y de vivienda.
Esta es parte de la historia de vida de María Eugenia Tovar, una mujer que hace parte de las nominadas a Personaje del Año 2016 en el sector rural y que tiene un liderazgo propio en el sector cafetero en Pitalito
“Seguimos trabajando para mejorar cada día, la calidad de vida del sector agrario, de nuestro sur del Huila, donde somos primeros en calidad y cantidad del mejor grano de café” dice con la satisfacción del deber cumplido.
Tomado de DIARIODELHUILA
