Al complejo judicial de Paloquemao fue trasladada la esposa de un policía que resultó muerto junto a sus 2 hijos durante una riña familiar.
La mujer, de 37 años, se recuperaba en la Clínica La Paz, en Bogotá, y tras mostrar una mejoría fue detenida y ahora deberá responder por el delito de homicidio agravado.
La captura fue realizada ayer jueves en el mencionado centro asistencial y a los juzgados ella llegó hacia las 4:00 de la tarde, según informó el diario El Tiempo.
Una imagen deja ver que la mujer llegó a Paloquemao fuertemente custodiada por agentes del CTI de la Fiscalía, quienes la arrestaron.

El crimen del policía y los 2 niños
La tragedia ocurrió el domingo 24 de marzo en la mañana en un apartamento del conjunto residencial Parques de Primavera, ubicado en la localidad de Puente Aranda, centro de la capital.
Ese día murieron el patrullero de la Policía Iván Arturo Zorro Penagos, de 35 años, y sus 2 hijos de 7 y 10 años, quienes recibieron varias heridas de arma blanca.
Mientras que la esposa del uniformado, madre de los niños y hoy capturada fue encontrada herida por una vecina en un ascensor.
De acuerdo con El Tiempo, la mujer tenía múltiples heridas de arma blanca: 7 en el abdomen, 3 en el tórax, una en el cuello y algunas más en los brazos y en la espalda.
Los vecinos de esta familia aseguraron que ese fin de semana el patrullero Zorro Penagos estuvo de descanso y la noche antes de su crimen estuvo con su esposa hasta la madrugada fuera del conjunto residencial.
Pero la riña familiar ocurrió luego de las 8:30 de la mañana, cuando la pareja, al parecer, estaba en estado de alicoramiento.
Conjunto residencial en el que ocurrió el triple crimen. Imagen tomada de Noticias RCN.
Algunas versiones indican que primero la pareja se enfrascó en una discusión y después iniciaron las agresiones.
El general Hoover Penilla, comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, precisó que el patrullero Zorro Penagos estaba adscrito a la Dirección de Carabineros, donde laboraba como guía canino.
Las autoridades tratan de determinar la responsabilidad de la mujer en el crimen de su marido y de sus pequeños hijos.
Algunos vecinos también precisaron que varias veces se enteraron de peleas familiares en el apartamento en el que ocurrieron los hechos, que desde entonces permanece sellado con cintas y avisos de la Fiscalía.