Jóvenes bailando en una fiesta tecno, puestos de comida abarrotados y embotellamientos por todas partes: el paisaje de Wuhan ya no tiene nada que ver con la atmósfera de ciudad fantasma que vivieron las costas del Yangtsé desde el 23 de enero
Wuhan, China este fin de semana.
— 🌎 Nuestra Tierra en Fotos 🌎 (@TierraEnFotos) August 17, 2020
Wuhan fue el epicentro del #COVID-19. pic.twitter.com/NEe1Wki8Zd
Miles de wuhaneses hacen fila todas las mañanas frente a caravanas que venden desayunos. Una escena que contrasta con la multitud el uso de tapabocas en Wuhan el objeto símbolo de la pandemia, así como los trajes completos y los anteojos de seguridad, dejan su lugar a las sombrillas y los anteojos de sol.
Los turistas volvieron y se fotografían sonrientes frente a la Torre de la Grulla Amarilla, uno de los monumentos emblemáticos de Wuhan, con sus artesanías rojas y naranjas.