De repente, Jovita escuchó una fuerte explosión en el patio de su casa y todos los cuartos se llenaron de humo. Era un casquillo de gas lacrimógeno, un arma química utilizada para disolver protestas al aire libre.
Pero la abuelita no sabía si salir a la calle, ya que los ruidos de los enfrentamientos la asustaban por lo que decidió llamar a su hija Sandra y le suplicó que fuera a buscarla.
No podía respirar, le ardían los ojos, la boca y se ahogaba.
Sandra llegó rápidamente a la vivienda donde estaba su madres y la llevó a la Clínica Rafael Uribe, pero Jovita sufrió un paro respiratorio del que pudieron estabilizarla siendo las 2:30 de la mañana.
Lamentablemente, dos horas después, sufrió otro y falleció.
María Jovita Osorio había sido madre comunitaria los últimos 30 años de su vida. Se dedicaba a cuidar niños entre los dos y cinco años de edad.
Cali
— La Silla Vacía (@lasillavacia) May 6, 2021
Jovita Osorio. 73 años. Gases lacrimógenos cayeron en el patio de su casa. La mujer estuvo tan expuesta a los químicos que sufrió dos paros respiratorios y falleció.
Los últimos 30 años de su vida trabajó como madre comunitaria, cuidando niños de entre 2 y 5 años. pic.twitter.com/1HALAiMw2K