Según trascendió en medios locales, el cura acudió al hospital de Montería porque había intentado suicidarse, una vez fue atendido, el servidor de la Iglesia Católica escapó pero se entregó en las últimas horas.
Los padres de la niña interpusieron la denuncia contra este cura porque, según el testimonio que han entregado, habría aprovechado que la menor actuaba como acólita de la iglesia La Inmaculada de San Bernardo Del Viento, de la cual Galvis era párroco, para abusar de ella.
La niña fue llevada al hospital porque presentaba dolores similares a los cólicos menstruales.
Allí, tras una revisión, se determinó que había sido sometida un aborto.
“Rechazamos totalmente lo que hizo el padre, si lo hizo de esa manera. Es una niña de 13 años, se sabe que es una violación. Es un delito y lo reconocemos”, dijo Monseñor Ramón Alberto Rolón, obispo de Montería.
Entre tanto, la menor y su familia reciben atención psicológica por parte de la regional de Montería del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.