El nuevo Código de Policía, aprobado la noche del jueves pasado, le siguen lloviendo criticas de diferentes sectores del país, que ven su aprobación como un retroceso para las libertades y derechos ciudadanos.
El lunes próximo se realizará la conciliación entre Cámara y Senado de los 245 artículos del proyecto, algunos de los cuales han generado la polémica porque sus oponentes aducen que le da “súper poderes” a la Policía Nacional, como es el ingreso a las viviendas sin orden judicial “cuando fuese de imperiosa necesidad” o el traslado de protección de una persona que se encuentra en un espacio público en un estado alterado de conciencia.
Sin embargo, el ministro de la Defensa, Luis Carlos Villegas, celebró la aprobación al señalar que el código vigente rige hace más de 40 años y no se compadece con la tecnología ni los comportamientos actuales.
En su criterio, este es un código moderno que puede interpretar mejor las amenazas a la seguridad ciudadana en temas cotidianos como el hurto callejero, microtráfico, ruido...
El ministro Villegas insistió en que este Nuevo Código de Policía y Convivencia le dará un “nuevo aire” de responsabilidad cívica a los ciudadanos.
“Con esto la Policía aumenta sus compromisos y esperamos que la implementación del Código de Policía cambie la cultura ciudadana. No solamente la fuerza policial, sino también los deberes de los ciudadanos frente a los derechos colectivos y frente al Estado”, puntualizó.
De acuerdo con el Ministerio de Defensa, este Código sí se ajusta a la Constitución de 1991 y permitirá enfrentar con rapidez la invasión de espacio público, a quienes botan basura, hacen grafitis en sitios no autorizados o le dan mal uso a la Línea 123.
Pero voces como la del expresidente de la Corte Constitucional, José Gregorio Hernández, opinan que varios de los artículos de este Código son un retroceso para las libertades y derechos del ciudadano porque dan lugar a que la autoridades puedan abusar.
El abogado asegura que varios de los artículos -como el del ingreso a las viviendas sin orden judicial, la privación de la libertad o la vigilancia de la Policía sobre espectáculos y reuniones públicas- al ser violatorias de la constitución podrían ser declaradas por la Corte Constitucional inexequibles, si algún ciudadano instaura una demanda.
- Los polémicos
El punto que mas debate ha causado es la posibilidad de los policías de ingresar a la vivienda, sin orden judicial, “cuando fuese de imperiosa necesidad”.
Otro de los artículos es que se pueda conducir a una estación de Policía una persona “que se encuentre en grave alteración de su estado de conciencia por motivos de orden mental o consumo de bebidas alcohólicas o psicoactivas y cuando una persona esté en peligro de agredir a otra”.
“Trámite del proceso verbal inmediato”, que es cuando una persona que presente un comportamiento contrario a la convivencia, podrá ser retenida para ser oído en “descargos”.
Las multas
- $82.000 debe pagar por no recoger los excrementos de las mascotas, por portar audífonos mientras se transporta en bicicleta y por utilizar dispositivos con cámara o video en lugares privados sin consentimiento.
- $91.927 pagará si ingresa o intenta ingresar a un niño o menor de edad a un evento en el que la vida o integridad –física y moral – del mismo pueda estar en riesgo. También para los conductores que no respeten señales de tránsito o que realicen maniobras peligrosas o de alto riesgo.
- $325.00 por publicar fotos íntimas o privadas de otra persona, sin autorización.
- $160.000 por comprar un celular robado y si se altera este la multa será de $650.000.
- $328.000 por no separar correctamente los residuos en la basura.
- $328.000 por protagonizar sonidos ruidosos en fiestas, reuniones o ceremonias, irrespetar o perturbar las normas propias de lugares como templos, cementerios, clínicas o bibliotecas.
- $367.709 a quien destruya, manipule, altere o fuerce las puertas o sistemas de acceso en un sistema de transporte masivo (estaciones, buses articulados, metro, tranvía, vehículo férreo, cable aéreo) o vehículos de servicio público o urbano de pasajeros.
- $735.418 por agredir, irrespetar o desafiar a un Policía, por llamadas que se hagan a la línea de emergencia 123 que sean para realizar bromas o por agredir física o verbalmente a miembros de la comunidad LGBT.
