Niña de 8 años murió por presunto maltrato en Pitalito


Las autoridades en Pitalito investigan las causas de la muerte de una menor de ocho años, que se produjo este sábado, en el centro asistencial de este municipio.




La menor, identificada como Deimy Natalia Motta Guaca falleció éste sábado luego de sufrir un colapso orgánico que le produjo la infección pulmonar a raíz de lesiones recibidas en un aparente caso de maltrato intrafamiliar.

Una pequeña de 8 años, es la última víctima de un aparente caso de violencia intrafamiliar ocurrido el pasado martes 5 de marzo en un hogar del barrio La Pradera de Pitalito

La niña fue llevada por su progenitor a un centro asistencial con una lesión en la rodilla derecha, aparentemente por una caída accidental que, según la progenitora de la menor, en realidad es un golpe ocasionado por un castigo físico al que habría sido sometida.




El médico quien la atendió, decidió enviarla a la casa para que se recuperara, sin embargo, siguió presentando dificultades de salud que obligaron nuevamente su visita al hospital en donde le fue diagnosticada una severa infección en los pulmones a causa de la llegada a través del torrente sanguíneo de líquidos infectados.

Esa situación hizo que se ordenara su rápida remisión a Neiva, sin embargo y por las complicaciones que presentó durante el inicio del viaje, la ambulancia debió retornar a Pitalito en donde fue ingresada al área de reanimación, en donde tras un colapso orgánico, falleció la tarde de éste sábado.

La progenitora de la menor quien no convive con el padre de Deimy Natalia Motta Guaca desde hace cerca de dos años, denunció que su hija era sometida a constantes maltratos físicos y psicológicos en el nuevo hogar que compartía con otros menores y su madrastra, por lo que pidió de las autoridades investigar sobre las causas que originaron su repentina muerte.

El cuerpo de la niña fallecida, fue ingresado a la morgue del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses en Pitalito en donde se establecerá si hay razones para acoger las sospechas de la atribulada madre quien reside en la vereda El Mortiñal y que por la falta de recursos económicos pide la solidaridad de la comunidad laboyana para poderle dar cristiana sepultura a su hija.

Tomado de LaVoz de la Región

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