El pasado fin de semana un adulto mayor fue reportado por sus familiares como desaparecido. Durante varios días la familia pensó lo peor y movió cielo y tierra haciendo eco a la situación para dar con el paradero del hombre.
Sin embargo, las autoridades que se pusieron al tanto del caso, descubrieron en las cámaras de seguridad del aeropuerto El Dorado de Bogotá, que el anciano de 72 años había salido de la ciudad con destino a la isla de San Andrés.
Con ayuda de la Policía de la isla, iniciaron la búsqueda del hombre en varios sitios turísticos, hasta que lo encontraron disfrutando de las hermosas playas del lugar.
Una vez que el hombre se entera de que ha sido reportado por sus familiares como desaparecido, y es interrogado por las autoridades él les respondió:
“Me les volé porque me gané un chance y me dieron un buen premio. Yo ya les di toda la vida lo que pude, y ahora estoy viejo. Este dinero me lo gane yo y me lo voy a disfrutar sin compañía”.
El hombre además le dejó claro a los agentes y a sus familiares, que se regresaría a su casa cuando terminara de disfrutar su grandioso premio.
“Lo más seguro es que ellos quieren que yo vaya para que les dé parte de lo que me gané en el chance, pero tranquilos oficiales, Yo estoy muy bien y volveré cuando me haya gastado la plata del premio”.
Los agentes pudieron comprobar que el hombre no necesita ningún acompañamiento porque goza de un excelente estado de salud.
Este hecho recuerda la ocasión en que un hombre decidió ponerse una máscara cuando fue a reclamar el premio de la lotería que se había ganado, con el objetivo de que nadie le pidiera plata. El hecho ocurrió en Estados Unidos.
El hombre que se ganó aproximadamente 3.600 millones de pesos utilizó la máscara de la famosa película de terror ‘Scary Movie’, para evitar ser reconocido.
O también recuerda el caso de unos abuelos canadienses que se hicieron millonarios tras encontrar un viejo boleto de lotería, mientras ayudaban a su nieto a hacer su tarea.
Los adultos mayores encontraron el boletos en uno de los libros de la biblioteca, el cual habían adquirido meses atrás.
