El recién nacido fue hallado por las autoridades envuelto en sábanas y dentro de una bolsa plástica en una vivienda en la vereda de Canaguaro, en el municipio de Granada el pasado 10 de febrero en un hecho que conmocionó a la comunidad del Meta.
La mujer estaba siendo atendida en el hospital Departamental de Granada y hasta el último momento negó haber estado embarazada, pero los exámenes médicos determinaron que tuvo un embarazo a término de tiempo completo con parto espontáneo. El pasado 10 de febrero y al no tener atención médica su cuerpo se desangraba por lo que tuvo que ser internada en Unidad de Cuidados intensivos y en horas de la noche de ayer falleció.
Las autoridades continúan la investigación sobre el caso del cual Erika era la principal sospechosa en el homicidio de su hijo recién nacido.